Hola masajista. ¿Sientes que no avanzas? ¿Dices que la cosa está mala? [Aquí iba un chiste de Chiquito]. ¿Tienes pocos clientes de masaje? ¿Crees que solamente hay que esperar a que funcione eso del boca-boca? ¿Le sigues llamando boca-boca en lugar de boca-oreja que es más correcto?
Está claro, tienes mucho por aprender todavía. Yo también, claro… Y eso es bueno, porque para eso estamos aquí. Para aprender. Para vivir. Para sobrevivir a algo que llaman crisis. Algo que nunca terminará. Dicen que se pasa, pero seguimos dentro del miedo. Es parte de la vida. Asusta mucho, pero tienes la oportunidad de elegir.
Si te sientes que no avanzas y que tu proyecto de masajista está estancado… Si das menos masajes a la semana de los que te gustaría… Aquí te propongo cinco ideas que he versionado a mi manera. Espero que te sirvan para reflexionar sobre cómo vives tu situación actual.
Reinvéntate
Si eres masajista y piensas que no puedes vivir de ello tienes dos opciones: Rendirte o luchar.
- Ríndete definitivamente. No te dediques a los masajes. Es lo más rápido, lo más fácil y aparentemente lo más barato. Abre tu mente y dedícate a otra cosa.
- Lucha decididamente. Sigue adelante con tu sueño de ser masajista. Abre tu mente y cambia tu manera de pensar. Porque está claro que no funciona. Si cambias tu pensamiento cambiarás tu realidad. Eso lo dice la ciencia, la filosofía y el sentido común. ¿Lo has intentado alguna vez? ¿Lo habías considerado?
¿Lo has pensado? Atrévete a pensar en otra realidad. Imagínate otra situación. Es posible. ¿Qué hace falta? ¿Qué habilidades necesitas? ¿Qué puedes hacer para cambiar de dirección?
Atrévete a cambiar, masajista. Cada cambio es una oportunidad para vivir nuevas experiencias. Para crecer como persona y como masajista. En este ambiente económico actual puedes encontrar tu nicho de mercado. Busca nuevas oportunidades a tu alrededor. No hace falta irte lejos. La zona de confort empieza y termina en tu cabeza.
Reúnete
Júntate con más masajistas. Pasa tiempo con otra gente como tú. Con ganas de cambiar. Aunque todavía no sepáis cómo hacerlo. Eso que llaman conciencia colectiva funciona. Las decisiones que tomas ahora dependen de ti y también de las personas con las que pasas más tiempo.
¿Con quién andas, masajista? Pregúntate: ¿La gente que te rodea es la adecuada para avanzar? ¿Son quienes te apoyan? ¿Te ayudan a evolucionar? ¿Qué te aportan a largo plazo? ¿O deberías estar cerca de quienes piensan en positivo? ¿Dónde puedes encontrar cabezas pensantes, creativas, inconformistas y luchadoras?
Aprende
Aprende marketing, masajista. Aprende a vender tu servicio, que son tus masajes. Desarrolla nuevas habilidades personales. Mejora tu capacidad para anunciar tu producto, que es tu masaje. Es normal que tengas miedo. Por eso pones tantas excusas. Deberías darte cuenta.
Inténtalo. Equivócate. Fracasa. Vuelve a intentar. Aprende. Inténtalo otra vez… Eso forma parte del buen marketing masajista. Es la única manera de aprender. Lo que necesitas no es saber más de masaje, sino practicar cómo vender más. No hay secretos.
Deja ya de apuntarte a nuevos cursos de masaje. Empieza a desarrollar tus propias habilidades personales para hacer lo que se llama marketing humano. Las técnicas avanzadas, las manipulaciones expertas y las nuevas terapias son todas estupendas y maravillosas, claro que sí. Y los conocimientos más avanzados de anatomía o fisiología son importantes. Pero ahora toca ganar más invirtiendo menos.
Tienes que aprender a vivir del masaje. No puedes solamente sobrevivir. Porque el mundo necesita masajistas y lo sabes [chiste de Julio Iglesias]. Hay mucha gente que necesita tu ayuda. Dolores de cuello. Rigidez de hombros. Espalda sobrecargada. Piernas cansadas. Estrés y tensiones por todas partes… Te están esperando. Aunque haya crisis. Te necesitan. Recuérdalo.
Céntrate
¿En qué piensas cuando hablamos de la crisis y de tus masajes? Es muy fácil gastar energía pensando en lo que debería ser. Seguro que le das muchas vueltas a lo que no te gusta. Diciendo que te gustaría que todo fuera de otra manera.. Ya sabes a qué me refiero… Dedicas mucho tiempo a ese futuro ideal que tanto te gustaría tener, ¿verdad?
Pues lo mejor es pensar en el ahora. Enfócate en el presente. Es muy importante. Todo lo que es pasado ya se ha pasado y el futuro todavía no ha llegado. Lo pasado pasado está. Solamente hay arrepentimientos y culpas. Lo futuro está sin definir. Solamente contiene preocupaciones y miedos. Por lo tanto, piénsalo. Aquí y ahora es el único momento que tienes.
¿Y si ésto fuera así? ¿Y si lo otro fuera asado? Si tienes esas preguntas mucho tiempo en mente, entonces atraerás demasiados pensamientos que te dispersan. El subconsciente trabajará en algo que te desanima. Una posible solución para cambiar esos patrones que se repiten es ponerte alarmas de vez en cuando para recordarte que es mejor centrar tu energía en lo que estés haciendo. Vive tu presente aquí y ahora.
Actúa
Tu mente es la mejor herramienta para tu negocio de masajes. Lo último que deberías hacer es no hacer nada. Tenlo claro. Es una cuestión de actitud (lo que haces). Más que de aptitud (lo que sabes o para lo que vales). Pregúntate qué puedes hacer. ¿Qué puedes mejorar? ¿Qué habilidad tienes que refinar?
Inténtalo. Muévete. Desarrolla nuevas maneras de pensar. Nuevos hábitos personales y nuevas habilidades profesionales. Es todo lo que necesitas para conseguir nuevos clientes de masaje. También hay que mantener a los que ya tienes. Es una cuestión de crecimiento personal, de mejora constante y superación. ¿Cómo puedes aprender eso?
Pide ayuda. Busca alguien que te oriente. ¿Quién te puede enseñar a hablar en público? Piensa en tu grupo de masajistas para funcionar en concordancia. ¿Qué podeís hacer para cambiar la situación? Haz un plan para formarte de verdad. ¿Cómo se aprenden las estrategias de marketing masajista? A veces las cosas son muy fáciles, pero tienes que dar un paso adelante. ¿De quién es la responsabilidad de tu negocio?
CONCLUSIÓN:
Para sobrevivir como masajista, empieza a vivir. Disfruta. Equivócate y celébralo. Intenta. Juega. Practica y déjate enseñar. Haz un plan y supérate. El mundo te está esperando, masajista.
¿Cómo vas a desarrollar tu negocio de masaje? ¿Qué crees que necesitas para conseguir más clientes? ¿Cuál es tu plan? ¿Sabes cómo vivir del masaje?
Esta reflexión es valida para los masajistas y otros profesionales es fantástica. ¡Gracias por compartirla!
Gracias por tu comentario, Dolors 😉
¿Eres masajista? Te deseo mucha y muy buena suerte..
Hola Antón…Gusto de volverte a saludar y seguirte la pista. Tu escrito es muy didáctico y cierto. Me has puesto a pensar. Gracias por decir lo que necesitamos… Felicidades!!!
Gracias por el mensaje, Tere. Me anima mucho para seguir mejorando y publicando cada vez más…
Normalmente no solemos comentar ni dar opiniones cuando leemos algo, pero es muy útil y necesario saber si estás dando en la tecla o necesitas afinar más. Un abrazo 😀
Gracias por tu palabras y animo
De nada, Raquel. Cuéntame cómo te va 😉
muy buena palabras saludos
Gracias, Yris. Ánimo!!
Gracias es muy agradable saver tantos tips para nosotros los Masajistas…