Sentir que te escuchan da sentido al sufrimiento o problema. Es mucho más que un desahogo. Es mirarte al espejo. Contar la historia de tu vida. Una cuestión de narrativa. Nos define como personas y comunidades.
Contar lo que nos pasa también nos ayuda. Es parte de la relación de ayuda. Esa que ocurre al cuidar. Un tema apasionante para recordar y seguir abordando. Otro día…
Dar sentido a nuestra existencia. Temazo para pensar. Una cuestión difícil de definir. Tan necesaria de tratar como delicada de aplicar.
¿Algo que contar? Te escucho 😉
Alguien puede escucharme., sin interrucciones?
Terapia escuchARTE.
Claro que sí, María José. Hablamos?