¿Cuánto vale o cuánto cuesta? ¿El día entero dando masajes? ¿Aprendiendo a dar masajes? ¿Enseñando? ¿Teoría o práctica? ¿En dinero o en esfuerzo? ¿Curso de masaje en un día?
El domingo dedicaste todo el día al masaje sentado. Hicimos una formación intensiva que no me veo capaz de repetir. Más que nada, para asegurar la calidad de mis cursos, claro.
Terminé exhausto pero satisfecho. Este post es para darte las gracias. Por venir. Por participar. Por tu presencia. Por tu trabajo. Imagino que para tí 3/4 de lo mismo.
¿Un curso de masaje en un día?
Un día entero de curso intensivo. Vale poco y cuesta mucho. O pagas poco y te cuesta mucho. Ganas poco y disfrutas mucho. La inquietud y la curiosidad no te cuestan nada. Eso es un regalo.
Un domingo de masaje no tiene precio. Se lo pones tú que lo pides. Se lo pones tú que lo pagas. De tu ética profesional. De tu necesidad económica. De tus posibilidades económicas.
La parte económica del curso de masaje
Vale poco pero cuesta mucho. Sacrificas un día con tu familia. Tu fin de semana en casa. El domingo que ibas a descansar. O saliendo con tu gente. Sólo tú lo sabes. Sólo tú lo valoras. Sólo tu lo disfrutas.
Vale lo que te quieran cobrar. Vale lo que quieras pagar. Cuesta esfuerzo. Cuesta tu tiempo. Cuesta tu dedicación. Tu energía.
Ganas poco pero curras mucho. Está claro que quien da los cursos, tu profesor de masaje, tiene que ganarse algo. Para eso lo dará, ¿verdad? Pues a eso se reduce la parte económica del curso de masaje. Corto o largo, tiene un precio. Tienes que gastártelo. Si puedes…
Luego está lo que tu puedes pagar. Lo que te puedes gastar.
Te cuesta el sacrificio de ir. Te gastarás más o menos. Suele ser más más que menos. Pero eres masajista y tienes ganas de superarte, todo vale y todo cuesta. Si. Pero sólo si tiene sentido…
La parte profesional del curso de masaje
Te han enseñado muchas técnicas, pero no te han dicho cómo conseguir clientes. Te explicaron la anatomía que está en los libros. Sí, también hay bolsa de trabajo. No sabía que el trabajo estaba allí. Dentro de una bolsa…
¿Otro curso? Pregúntate para qué lo haces. ¿Tiene sentido? ¿Por qué lo hago? ¿Qué voy a aprender? Dinero. No siempre te dice lo que valen las cosas.
¿Sabes cómo salir a la calle a conseguir nuevos clientes de masaje?
La parte práctica del curso de masaje
Tienes un curso de masaje. ¿Otro? Toda la semana cumpliendo horarios y hoy también. No paras. ¿Te compensa? ¿Tienes opción? Ya sé que te gusta. Pero no sé si te compensa. Tu familia se reúne a comer. Te dicen que por qué no comes con ellos. Es duro. Los domingos solemos quedar para descansar. O para hacer algo diferente. Mejor con los amigos. Con la familia. Pues eso, el valor se lo pones tú. Según lo que valga para ti. En precio o en esfuerzo. En dinero o en tiempo.
¿Te compensa? Hacer algo porque te gusta. Hacer algo porque tenga sentido. Hacer algo porque dicen que hay que hacerlo. Esa es la paradoja.
La parte humana de un curso de masaje
Valor y precio muchas veces no coinciden. Lo que de verdad te gasta es no intentar avanzar.
Vienes a Murcia. Traes algo de comida. Hace un día precioso. Pero como estás en el curso, sólo puedes mirar por le balcón y disfrutar de las vistas. Tus amigos se han ido a pasar el día en el monte. Tu familia está en la playa. Da igual.
Para mi no tiene precio. Un domingo de formación masaje. Rodeado de masajistas curiosos. Masajistas motivados. ¿Acaso no es eso lo que necesita el mundo? Gente dispuesta a dar.
Una experiencia tan intensa como satisfactoria. Tan agotadora como alegre. Tan potente como efímera. Tan sencilla como humana. ¡Muchas gracias!
Siempre a ti, amigo.
holaaaaaaaaaaaaaaa